Café de las Tierras Altas: bondad orgánica de Papúa Nueva Guinea

Aquí en Clandestino, Papúa Nueva Guinea es un origen cercano a nuestros corazones, no sólo geográficamente. El café de la región de las Tierras Altas ha sido la columna vertebral de nuestra mezcla casera Magneto desde 2011 y todavía estamos enamorados de sus notas de nueces, chocolate con leche y frutos secos.

Hemos encontrado algunos cafés increíbles que obtenemos directamente y, para darle crédito a los agricultores que viven y cultivan café en las escarpadas montañas de las Tierras Altas, le pusimos su nombre a este café. 

La provincia de las Tierras Altas Orientales es un terreno imponente y accidentado con picos de las cordilleras Kratke y Bismarck que se elevan a 3700 msnm, abundantes sistemas fluviales Asaro y Lamari que desembocan en Purari y exuberantes valles de selva tropical que se extienden por todas partes.

Este rico ecosistema y clima fértil brindan un increíble potencial para el café de alta calidad. Desde su introducción a finales del siglo XIX, el café siempre ha crecido bien bajo una cuidadosa gestión agrícola, con poca o ninguna necesidad de fertilizantes. Los mayores desafíos que frenan el progreso provienen de las deficiencias crónicas de infraestructura y la inestabilidad económica.

Enclavadas en el corazón de la escarpada provincia de las Tierras Altas Orientales de Papua Nueva Guinea, se encuentran dos aldeas remotas, Lufa y Okapa, donde los pequeños agricultores dependen del café como su principal fuente de ingresos. Cultivan tan solo 20 árboles en jardines entre multitud de cultivos de subsistencia para alimentar a sus familias.

La opción de una venta rápida y barata a cualquiera que tenga los medios y el transporte hasta una fábrica les desalienta la inversión en sistemas de calidad. Los agricultores apenas se están dando cuenta del verdadero potencial de su cosecha.

Aquí es donde entra en juego nuestra increíble socia Maureen Ken. Maureen, una empresaria local con la misión de generar confianza y relaciones a largo plazo con estos productores rurales, fundó Lass Malo Coffee (LMC) junto con su esposo Ken Dumudi en 2015.

Liderado localmente y teniendo en cuenta la prosperidad de la remota comunidad de pequeños agricultores, LMC proporciona un puente conveniente para que los productores vendan su café a un precio de valor agregado.

El impacto del pago de primas es significativo tanto para los medios de vida de los agricultores como para la mejora de la calidad y la coherencia en todos los grados de exportación.

Los estándares más altos exigen mucho cuidado en el manejo agrícola, la cosecha y las prácticas poscosecha. Los pequeños agricultores recogen, lavan y hacen flotar las cerezas a mano para limpiar y clasificar selecciones perfectamente maduras. Las cerezas se despulpan a mano el mismo día antes de pasar a tanques de fermentación durante 24-36 horas.

Una vez fermentado, el café se lava con agua limpia para eliminar el mucílago y luego se traslada a camas elevadas para que se seque a la sombra durante 3 o 4 días.

El pergamino seco se transporta de forma gratuita en camiones de LMC a su nueva y en expansión instalación de procesamiento seco en Goroka. Una vez clasificado, el café está listo para ser empacado y transportado al puerto local y enviado a Australia, que está a solo unas horas de distancia.

Gracias a la visión de Maureen y Ken, el futuro en esta región cafetera luce brillante.

La asociación cumple todos los requisitos para nosotros: precio justo para los agricultores, calidad constante en la taza y traer cambios positivos a la comunidad. También estamos entusiasmados de poder apoyar a más exportadoras emergentes como Maureen.

En 2023, pudimos darle la bienvenida a Maureen, Ken y su familia a nuestra tostaduría de Noosaville para mostrarles los alrededores y conversar sobre todo lo relacionado con el café. ¡Pronto habrá otro viaje de origen!

Highland Coffee es una mezcla del mejor café de las montañas de Papúa Nueva Guinea con notas de rico chocolate amargo y nueces tostadas.